El estremecedor caso salió a la luz cuando una nena de la Escuela Secundaria 60 solicitó reunirse con la dirección para advertir que su madre estaba privada de su libertad por un hombre de 33 años, y que éste también maltrataba a sus hermanos. Según la niña, aquel sujeto solo permitía que la mujer saliera para llevar a los chicos al colegio, lo que le dio la oportunidad de acercarse a la directora y relatar la situación.

Tras escucharla, las autoridades escolares citaron a la madre, quien ratificó la denuncia y explicó que desde hacía semanas vivía bajo amenaza y violencia. De inmediato, ambas se dirigieron a la Comisaría local, donde formalizaron la denuncia contra el hombre, que residía en una vivienda del barrio Parque Hermoso junto con una niña de cinco años.

El testimonio desencadenó un operativo policial coordinado por la fuerza local y la Fiscalía de Familia. Los efectivos irrumpieron en el domicilio y rescotaron a la mujer y a sus hermanos, trasladándolos al Hogar Galé para su protección y reubicación temporal. Asimismo, se dictó una orden de restricción de acercamiento contra el agresor.

Paralelamente, en un allanamiento, la policía secuestró varias armas de fuego, todas sin la documentación que acredite su tenencia legal. Las autoridades evaluarán ahora la situación penal del imputado, mientras la familia recibe asistencia psicológica y social.

La intervención de la escuela, y en particular el coraje de la niña al denunciar el hecho frente a sus docentes, fue clave para evitar una tragedia mayor y brinda un claro ejemplo de la importancia de la red de contención educativa en casos de violencia doméstica.