El ex presidente argentino recibirá siete millones de pesos como beneficio, desatando críticas y controversias en la opinión pública.
El ex presidente de Argentina, Alberto Fernández, recibió la confirmación de su jubilación de privilegio tras haber iniciado el trámite antes de finalizar su mandato. Este privilegio, otorgado a los ex mandatarios del país, generó una oleada de críticas y controversias en la sociedad.
Fernández, quien estuvo en el cargo desde 2019 hasta fines del 2023, solicitó el beneficio el pasado seis de diciembre, de acuerdo con lo establecido por la Ley 24.01. Tras cumplir con los tres meses de espera estipulados, la Administración Nacional de Seguridad Social (ANSES) confirmó que el ex presidente cobrará un total de siete millones de pesos por el tiempo en el que ejerció como Jefe de Estado.
La noticia generó un intenso debate público, especialmente en el contexto de reclamos por parte del Gobierno y del oficialismo para evitar que Fernández reciba este ingreso del Estado. Durante su campaña presidencial, el ahora ex presidente había anunciado medidas para anular este tipo de beneficios, pero estas no se concretaron y Fernández recibirá el pago correspondiente a su jubilación de privilegio.
Las redes sociales se convirtieron en un escenario clave para expresar el descontento con esta decisión. Líderes de la oposición, como Graciela Ocaña, manifestaron su rechazo de manera contundente. Ocaña denunció los privilegios y anunció medidas para intentar bloquear la jubilación de Fernández, haciendo referencia a decretos de emergencia previsional firmados por el propio ex presidente durante su mandato.