Pablo Moyano posterga paro y propone marchar a Plaza de Mayo mientras enfrenta disputas salariales y políticas con la Casa Rosada.
El Sindicato de Camioneros, liderado por Pablo Moyano, se encuentra en una encrucijada frente al Gobierno de Milei. Después de amenazar con un paro que no se concretó, Moyano ahora propone una movilización a Plaza de Mayo como medida de presión. El trasfondo del conflicto radica en la negativa gubernamental a homologar el aumento salarial del 45% propuesto por el sindicato, argumentando que ello desestabilizaría la tendencia descendente de la inflación.
El anuncio de un plenario sindical para el jueves deja en evidencia la tensión entre ambas partes. El Gobierno, liderado por Luis Caputo y Julio Cordero, advierte que cualquier medida de fuerza será considerada ilegítima, mientras que desde Camioneros se acusa al Gobierno de intervenir en negociaciones privadas y de buscar debilitar al sindicalismo.
El enfrentamiento se intensifica con la convocatoria de Hugo Moyano a cámaras empresariales para discutir un nuevo aumento salarial, y con la polémica generada por la supuesta vinculación política del sindicato con la candidatura presidencial de Axel Kicillof. Las negociaciones, además, se ven complicadas por la falta de acuerdo en torno a la conciliación obligatoria, dejando a los sindicalistas expuestos a la crítica pública.