La intervención municipal y provincial reveló el deterioro de un edificio abandonado y su uso ilícito.
Esta mañana, se inspeccionó un edificio abandonado situado en la esquina de Guayaquil y Gazzari, en el extremo sur de la ciudad, un trabajo realizado entre la Municipalidad de Villa Mercedes, el gobierno provincial y la policía local.
El operativo, impulsado por el Fiscal Maximiliano Bazla, tenía como objetivo determinar el estado del inmueble y constatar su uso actual, tras numerosas denuncias de vecinos y reportes de actividades delictivas. “Esto es un antro de perdición, un verdadero aguantadero”, declaró sin rodeos uno de los funcionarios participantes, subrayando la gravedad de la situación.
El inmueble, que en su momento albergó la fábrica de leche Artimer, presentaba un avanzado estado de deterioro. Durante la inspección, las autoridades encontraron mesas, sillas y colchones, lo que indica que una familia reside en una parte del edificio. Sin embargo, también se hallaron señales de ocupación irregular y uso frecuente por otras personas, a pesar de las condiciones insalubres y la presencia de basura y residuos peligrosos en toda la superficie.
Uno de los hallazgos más alarmantes fue la gran cantidad de restos quemados de cables, presuntamente robados, para extraer el cobre. Este hecho sugiere la posible implicación del lugar en actividades delictivas adicionales.
Participaron en el operativo personal de la Comisaría Décima y del Poder Judicial, junto con representantes de la Secretaría de Gobierno, Control Urbano, Planeamiento, Defensa Civil, Asistencia Social y la Fiscalía del Tribunal de Faltas de la Municipalidad de Villa Mercedes.