La actriz viajó desde Estambul a Milán junto al futbolista para asistir a un evento de belleza y acompañarlo al inicio formal del juicio de divorcio con Wanda Nara. Mientras ellos exhiben su relación en redes, la empresaria eligió el silencio virtual en la capital de la moda.
Milán amaneció con el habitual bullicio de la Semana del Diseño, pero entre influencers y ejecutivos sobresalía una postal que mezclaba romance y tensión legal: Eugenia “la China” Suárez y Mauro Icardi llegaron juntos desde Estambul para cumplir una doble agenda. Por un lado, ella asistió como invitada a la presentación de una firma sueca de cosmética vegana; por el otro, él debe comparecer hoy ante el tribunal que abrirá la etapa final de su divorcio de Wanda Nara, también instalada en la ciudad.
Vestida con un top negro, pantalón animal print y campera de cuero, la actriz se mostró distendida frente a las cámaras, brindó con la fundadora de la marca, Gabriela Elio, y subió cada detalle a sus seis millones de seguidores. Poco después, publicó la foto de una pizza margarita recién salida del horno: la pizca de “dolce vita” que nunca falta en su feed.
La calma aparente contrasta con el trasfondo judicial. Horas antes, Suárez había compartido una imagen íntima: los dos recostados, abrazados, escondidos tras un emoji de corazón. La ex Casi Ángeles ya no oculta el romance con el delantero del Galatasaray, vínculo que detonó el escándalo de infidelidad de 2021 y que ahora se exhibe sin filtros.
En paralelo, Wanda Nara publicó una frase que sonó a respuesta velada: “La mejor decisión que he tomado fue elegir el silencio. No tengo nada que demostrar”. Con ese mensaje, la empresaria dejó claro que prefiere la reserva mientras prepara su estrategia legal y se recupera de problemas de salud.
Icardi llega al juicio sin cargo de conciencia por infracción extradeportiva —su club lo autorizó a viajar—, pero con la presión de cerrar, de una vez, el matrimonio más seguido de la farándula argentina. El futbolista defendió que era “un acuerdo amistoso”, aunque dueños de restaurantes y fotógrafos milaneses juraron que sus gestos con la China distan de la discreción que se esperaría en la víspera de la sentencia.
Los usuarios de redes sociales no tardaron en lanzar dardos: algunos criticaron a Suárez por “robar esposos”, otros apuntaron a Icardi por “no enfrentar solo” a su ex. Para la actriz, en cambio, este viaje es una oportunidad de capitalizar la exposición: evento de belleza, paseo gastronómico y, de paso, presencia mediática garantizada.
El miércoles será el día decisivo. Mientras los flashes se concentren en las escalinatas de los juzgados de Milán, la pareja intentará mantener su rutina de cafés, eventos y selfies de alto impacto. Si la sentencia cierra definitivamente la historia con Wanda, la novela tendrá nuevo capítulo —y nuevos protagonistas— listos para alimentar el espectáculo.