El Grupo de Trabajo de la ONU denunció la privación de derechos y la interferencia en las elecciones presidenciales.
El Grupo de Trabajo sobre Desapariciones Forzadas o Involuntarias de Naciones Unidas emitió una alarma sobre el incremento significativo de desapariciones forzadas en Venezuela, especialmente dirigidas hacia miembros del principal partido de la oposición y militares. Según las expertas de la ONU, esta situación alcanzó proporciones preocupantes, afectando los derechos fundamentales de los ciudadanos justo antes de las elecciones presidenciales del 28 de julio.
Desde diciembre de 2023, se observó un aumento alarmante en las desapariciones forzadas que impactan a aquellos que ejercen su derecho a la libertad de expresión, asociación y participación en asuntos públicos. Esta tendencia, según el Grupo de Trabajo, podría tener un efecto disuasivo sobre la participación electoral libre y justa, socavando así la integridad del proceso democrático.
Las detenciones prolongadas y en régimen de incomunicación, según las expertas, equivalen a desapariciones forzadas y parecen seguir un patrón donde las personas son privadas de sus derechos fundamentales por las autoridades estatales. Esto incluye la negación de contacto con el mundo exterior y el acceso a asistencia legal. La situación no solo afecta a los detenidos, sino también a sus familiares, quienes enfrentan la carga emocional y logística de buscar a sus seres queridos en condiciones de incertidumbre y riesgo de represalias.
El Grupo de Trabajo enfatizó que la desaparición forzada viola múltiples derechos humanos, incluidos el derecho a la libertad y seguridad, y el derecho a no ser sometido a tortura. Además, subrayaron que la impunidad de estos crímenes socava la confianza en el Estado de Derecho y perpetúa un clima de miedo e inseguridad en la sociedad.