El acusado, de 57 años, se aprovechó de que la víctima solo podía comunicarse por señas y de que estaba sola.
José Luis Yacanto, de 57 años, fue condenado ayer a cinco años de prisión efectiva tras admitir que la mañana del pasado domingo 13 de febrero, en el barrio Tibiletti de la ciudad capital, abusó sexualmente de una mujer de 36 años que padece retraso madurativo. La sentencia fue emitida por decisión unánime por un Tribunal Colegiado compuesto por los jueces Guillermo Saá Petrino, José Luis Flores y Fernando de Viana, en un juicio abreviado.
El fiscal de Cámara, Esteban Roche, sostuvo que “hubo elementos contundentes en la investigación para incriminar a Yacanto”, entre ellos la denuncia radicada por la madre de la víctima y la palabra de una prima, quien auxilió a la mujer tras el hecho y pudo constatar las lesiones que le había provocado el ataque sexual.
También exhibió la declaración de dos hombres que pasaban a pie por la calle y vieron cómo el acusado sometía a la mujer en el patio de la casa de ella, indefensa por su discapacidad.
Según consta en un certificado médico con el que cuenta la Justicia, por su problema psicomotriz la mujer solo se comunica con su madre mediante señas, ya que no se puede expresar oralmente. El mismo también revela que padece un importante retraso madurativo.
Uno de los testigos recordó que Yacanto huyó de la escena, pero que lograron reducirlo a pocos metros hasta que llegó la Policía
Según las averiguaciones, el hombre, que estaba ebrio y es conocido de la familia, aprovechó que la madre de la mujer y su hermana habían salido a realizar compras y que la víctima estaba sola.
Roche también mostró los trabajos de planimetría y mediciones que hicieron los agentes de Policía Científica en la vivienda del barrio Tibiletti con el fin de reforzar la declaración de los testigos.
Así mismo, brindó el resultado del análisis de laboratorio de las prendas de vestir que se le secuestraron al acusado, en las que hallaron rastros de semen.
Todos esos argumentos fueron exhibidos frente a Yacanto, quien aceptó la calificación del hecho, "Abuso sexual gravemente ultrajante", aunque en primera instancia dijo que no recordaba la situación porque estaba borracho y solo mencionó que momentos previos había estado ingiriendo bebidas alcohólicas en la casa de su hermano, que se encuentra próxima a la de la víctima.
Al momento de la detención, frente al juez de Garantías 2, Ariel Parrillis, el hombre se había abstenido de declarar. Días después, el magistrado le imputó el hecho y dictó dos meses de prisión preventiva.
Ayer, luego de unos minutos, Yacanto, que tiene antecedentes por delitos como hurto y violencia familiar, terminó reconociendo su culpabilidad.
Posterior a esa revelación, los magistrados avalaron el acuerdo entre Roche y Nadia Agúndez, la defensora de Yacanto, y condenaron al hombre a cumplir la pena en el Servicio Penitenciario de la capital.