El chasis nº 211 de la Ferrari F2001, empleado por Michael Schumacher en el GP de Mónaco y en la carrera decisiva de Hungría 2001, se vendió por cerca de 16 millones de euros en una subasta de RM Sotheby’s, convirtiéndose en el monoplaza de Schumacher con mayor precio de venta, por encima del anterior récord de 12 M€ en 2002.
La casa de subastas RM Sotheby’s cerró esta semana la venta de la Ferrari F2001 de chasis nº 211 en 16 millones de euros, un hito que sitúa a este monoplaza por delante de cualquier otro coche de Michael Schumacher jamás subastado. El anterior máximo para una Ferrari de Schumacher era el F2003 vendido en 2002 por unos 12 millones de euros.
Este ‘muleto’ de Ferrari, destinado en principio como vehículo de reserva, adquirió protagonismo en el Gran Premio de Mónaco de 2001, cuando un accidente en entrenamientos obligó a Schumacher a subirse al chasis 211. Pese a salir a pista sin apenas rodaje, el alemán clasificó segundo y al día siguiente, gracias a la avería de David Coulthard, se hizo con la victoria con una conducción casi dominadora, permitiéndose incluso relajar el ritmo en la última vuelta para que su compañero Rubens Barrichello le escoltara a solo 0,431 segundos.
De reserva al cuarto título mundial
El mismo monoplaza volvió a brillar unas semanas más tarde, en el Gran Premio de Hungría, donde Schumacher aseguró su cuarto título mundial. En Hungaroring, el 211 salió desde la pole, lideró 71 de las 77 vueltas y certificó la victoria que igualó a Alain Prost con cuatro campeonatos a sus espaldas, al tiempo que daba a Ferrari el Campeonato de Constructores.
En aquella temporada sin límites presupuestarios, los equipos aún podían emplear coches de reserva en carrera. El 211, probado por Luca Badoer en Fiorano y en los libres de España, demostró que incluso un monoplaza ‘de backup’ podía convertirse en pieza clave de la historia.
Un palmarés de lujo y un nuevo récord de subasta
El hito de la F2001 no eclipsa, sin embargo, la venta de 50 millones de euros que alcanzó en 2025 el Mercedes W196 R de Juan Manuel Fangio (GP de Buenos Aires 1955). Pero sí sitúa a este Ferrari de Schumacher como el más caro del ‘Kaiser’. El chasis 211, con su motor V10 de 820 CV y 17.000 rpm, será recordado tanto por sus gestas deportivas como por su valor de coleccionista.
A lo largo de 2001, el monoplaza también compitió en clasificación de Europa y Francia, corrió en Hockenheim pese a un problema de combustible, y actuó de reserva en Canadá, donde Barrichello lo llevó al P5. Su legado técnico, bajo la batuta de Ross Brawn —quien lo consideró “el mejor coche que hemos producido”—, le otorga un lugar privilegiado en la galería de clásicos de la F1.
De Maranello al Principado, un símbolo de la era dorada
Desde su llegada a Ferrari en 1996, Schumacher transformó la Scuderia. Con el F2001, consolidó su dominio y configuró una época dorada para Maranello. Hoy, el chasis 211 vuelve a ser noticia: no solo por su historia de campeonatos, sino por haber pulverizado los récords de venta.
En paralelo, otras Ferrari de Schumacher conservan su apelativo de iconos: el F2004 conducido por Carlos Reutemann en Fiorano, o el ejemplar adquirido por Gregorio Pérez Companc, que su hijo Luis exhibe en eventos clásicos y cuya huella argentina se mezcla con la leyenda del Kaiser en la F1.