Un fallo en la red peninsular interrumpe trenes, aeropuertos y semáforos al mediodía, mientras técnicos y autoridades investigan si un ciberataque provocó la caída brusca de la demanda de más de 12 000 MW.
Un apagón de enorme magnitud sorprendió este lunes al mediodía europeo a ciudadanos de España, Portugal y provincias del sur de Francia. El primero de los reportes llegó pasadas las 12:30 h, cuando la red gestionada por Red Eléctrica Española (REE) detectó una caída repentina de la demanda: del orden de 25 184 MW a apenas 12 425 MW en cuestión de minutos.
Las principales capitales españolas —Madrid, Barcelona, Sevilla y Málaga— quedaron a oscuras. Aeropuertos suspendieron despegues y aterrizajes, los semáforos dejaron de funcionar y el servicio de trenes y metro se interrumpió por seguridad. En Barcelona y Madrid, la suspensión de la séptima jornada del Masters 1000 en la Caja Mágica constató el alcance deportivo y cultural del apagón.
Desde Portugal, la agencia Lusa informó que múltiples regiones también se quedaron sin electricidad, mientras los ciudadanos salían a las calles en busca de información. En Lisboa, EFE describió escenas de desconcierto ante la falta de comunicación oficial y la imposibilidad de usar teléfonos ni internet móvil.
A las 12:56 h, REE comunicó que “se han activado planes de reposición del suministro en colaboración con compañías del sector”, y que técnicos ya trabajan en todos los centros de control. Aunque aún no se ha confirmado la causa exacta, las primeras hipótesis —reunidas en una célula de crisis en Madrid— apuntan a un posible ciberataque o a un fallo simultáneo en varios puntos críticos de la red.
En París y regiones limítrofes, media docena de departamentos franceses sufrieron la misma interrupción. La compañía RTE, homóloga de REE, reconoció que está “investigando el origen del incidente” y que energías renovables y plantas tradicionales colaboran para restablecer el servicio.
Para los usuarios, la experiencia fue de caos: ascensores parados, cajeros fuera de servicio y hospitales funcionando en modo de emergencia con generadores. Fuentes de Renfe explicaron que la circulación ferroviaria tardará varias horas en normalizarse, a la espera de verificar la estabilidad de la red.
Por ahora, los gobiernos de España, Portugal y Francia mantienen reuniones conjuntas con el ENTSO-E (Red Europea de Operadores de Sistemas de Transmisión) para coordinar la restauración completa del suministro y dilucidar si el evento responde a causas técnicas o a un ataque digital de gran escala.