El peronismo concentrará frente a Casa Rosada en rechazo al fallo judicial por la causa Vialidad.
Luego de que el Tribunal Oral Federal 2 dispusiera la prisión domiciliaria para Cristina Kirchner, el Partido Justicialista reorganizó su estrategia de protesta y convocó para este miércoles a una masiva movilización en Plaza de Mayo, en repudio a lo que consideran una “proscripción” judicial contra la ex mandataria.
El llamado fue oficializado tras una reunión en la sede del PJ con gobernadores y dirigentes del peronismo. El acto comenzará a las 14 frente a Casa Rosada, y contará con la participación de Axel Kicillof, el Frente Renovador y otras agrupaciones del universo kirchnerista.
“Se ha roto el pacto democrático con la condena a una inocente”, denunció Mayra Mendoza, intendenta de Quilmes, una de las primeras en convocar a la marcha. Según remarcó, “hay muchos motivos para manifestarse pacíficamente”.
La protesta inicialmente iba a dirigirse hacia Comodoro Py, donde debía comparecer Cristina. Sin embargo, tras la resolución judicial que le concedió el beneficio de prisión domiciliaria, el PJ redireccionó la convocatoria hacia Plaza de Mayo.
El fallo habilita a la ex presidenta a cumplir la condena en su domicilio de San José 1111, barrio de Constitución, bajo control de tobillera electrónica, y deja sin efecto la citación judicial prevista para mañana.
Desde el entorno de Axel Kicillof confirmaron que el gobernador encabezará una columna propia junto a intendentes del espacio Movimiento Derecho al Futuro. Por su parte, el Frente Renovador movilizará con más de 300 micros, según informó el entorno de Malena Galmarini, Rubén Eslaiman y Juan Andreotti.
Sergio Massa, en tanto, definirá “a último momento” si se suma al acto.
En la sede del PJ nacional participaron los gobernadores Ricardo Quintela, Sergio Ziliotto y Gustavo Melella, además de los senadores Wado de Pedro, Anabel Fernández Sagasti, Lucía Corpacci, José Mayans y referentes legislativos como Germán Martínez y María Teresa García.
La movilización será una demostración de fuerza del peronismo en defensa de su principal figura, en un contexto de fuerte desgaste político, judicial y simbólico para el kirchnerismo tras la condena en la causa Vialidad.