Vivía entre caballos de carrera y camionetas 0km mientras dirigía una organización criminal que operaba en barrios vulnerables.
Un campo con 30 caballos, camionetas de alta gama y piletas ocultaba algo más que lujo. Era el centro de operaciones de Diego Funes, alias “El Gaucho” o “El Negro”, acusado de liderar una red de narcotráfico en Villa Mercedes desde mayo de 2021. La banda operaba con una lógica territorial firme, distribuía cocaína en los barrios Eva Perón I y II y mantenía vínculos directos con otra organización que introducía droga desde Buenos Aires, liderada por un sindicalista de la carne.
La organización tenía una estructura casi empresarial, con roles familiares: su esposa, su suegra (segunda al mando), su cuñada, su hermano y hasta las parejas de estos eran parte activa del negocio. Entre los más comprometidos está Héctor “El Oso” Frías, quien transfirió casi 60 millones de pesos por Mercado Pago a la esposa de Funes, encargada de administrar los fondos narco.
Los investigadores detectaron una fuerte presencia territorial: sabían con anticipación cualquier movimiento policial, gracias a una red de “alertas vecinales”. Durante los allanamientos del 21 de mayo, dos sospechosos intentaron huir alertados por mensajes previos, pero fueron capturados en plena calle.
La propiedad principal, ubicada al lado del hipódromo, era conocida por los vecinos como “el campo de la merca”. Allí vivía una mujer de su entorno, mientras Funes residía en una vivienda sobre calle Montevideo, donde también se secuestraron camionetas nuevas.
“El Gaucho” concentraba las decisiones estratégicas de la organización: compraba la droga, la redistribuía, decidía cuándo vender y con quién negociar. Hasta usaba testaferros para adquirir vehículos, propiedades y dólares, con los que blanqueaba las ganancias.
La Justicia Federal lo acusa formalmente como organizador del delito de tráfico ilícito de estupefacientes en su modalidad agravada por la participación de tres o más personas organizadas para cometerlo. La causa se enmarca en los artículos 5 y 11 de la Ley 23.737.
Antes de que termine la semana, el juez deberá resolver si dicta la prisión preventiva para el presunto capo narco y su entorno.