40 muertos y múltiples heridos en un acto terrorista que conmociona a la capital rusa.
Moscú fue sorprendida por un ataque terrorista que dejó al menos 40 muertos y una centena de heridos en la tarde de este viernes. El hecho ocurrió en el Crocus City Hall, una conocida sala de conciertos de la ciudad. Según los informes iniciales, el incidente involucró un tiroteo, una explosión y un incendio, llevados a cabo por al menos tres hombres armados vestidos con ropa de camuflaje.
La escena del crimen se convirtió en un caos, con imágenes impactantes de personas tratando desesperadamente de escapar del lugar mientras se escuchaban disparos y se veía humo saliendo del edificio. Testigos relataron escenas de terror, con individuos arrojando bombas molotov y prendiendo fuego dentro de la sala de conciertos, mientras que otros se lanzaban al suelo para evitar ser alcanzados por las balas.
Los servicios de emergencia, incluyendo la policía y las ambulancias, se desplegaron en la zona en un esfuerzo frenético por salvar vidas y controlar la situación. Se estima que más de 100 personas pudieron haber quedado atrapadas dentro del edificio, aumentando la angustia y la incertidumbre.
Mientras tanto, las autoridades rusas identificaron el vehículo utilizado por los perpetradores y establecieron un perímetro de seguridad ante el temor de posibles trampas explosivas. El Kremlin condenó el acto como un “horrible ataque terrorista”, prometiendo una respuesta firme y la persecución implacable de los responsables.