A días de la oficialización de las listas, los nombres que suenan para representar al Kirchnerismo de San Luis en la Cámara alta parecen más de lo mismo: dirigentes y funcionarios con décadas en el poder, respaldados por Alberto Rodríguez Saá en su afán de perpetuarse.
Pese a los intentos de mostrarse como un proyecto “renovador” o “con espíritu joven”, el Frente Justicialista sigue apostando a los mismos cuadros de siempre para competir por bancas en el Senado provincial en las próximas elecciones. Aunque la oficialización de los candidatos se conocerá el jueves, trascendieron nombres que forman parte del circuito más tradicional del peronismo sanluiseño y que ya han ocupado diversos cargos públicos durante las últimas décadas.
Nombres con “trayectoria” que prolongan la vieja guardia
Ayacucho: La docente y exdiputada Analía María del Valle Agüero encabeza la lista. Su experiencia parlamentaria no es novedosa, y su “compromiso con el proyecto de Rodríguez Saá” ha sido reiterado en cada instancia electoral previa.
Belgrano: Se postula Fernando Sebastián Yanzón, exjefe del Programa de Infraestructura Hídrica y actual presidente del PJ departamental. Su candidatura aparece luego de reiterados llamados de Rodríguez Saá a “reorganizar” el espacio, pero la fórmula sugiere la misma receta: un hombre de confianza de la cúpula Saá, con un libreto repetido.
Pedernera: El abuelo dirigente Juveín Roberto Quiroga—viejo conocido del justicialismo— aparece como titular. Ha sido preso político, concejal, diputado y funcionario. Su trayectoria es extensa, pero la pregunta es si traerá algo distinto a una provincia saturada de “más de lo mismo”.
San Martín: La actual senadora Mariana Clarisa Cruz aspira a reelegir. San Martín es un bastión histórico del peronismo, y la repetición de figuras como Cruz deja en claro que la voluntad de “renovación” sigue postergada.
El sello que los cobija no sorprende: todos responden a la línea oficial que Alberto Rodríguez Saá todavía controla. Aunque el líder peronista dejó la gobernación tras la derrota de 2023, sus hilos en el PJ provincial siguen intactos, y nada sugiere que la elección de estos nombres obedezca a una apertura a jóvenes cuadros o voces críticas.
¿Renovación o perpetuación de un modelo?
La selección de los candidatos arruina el relato de un peronismo “abierto a nuevas generaciones”. Por el contrario, pone en escena a dirigentes con largas décadas de militancia, algunos con vínculos de directa dependencia política con el exgobernador. En lugar de gestar caras frescas, el PJ continúa recostándose en el mismo elenco que lleva años ocupando bancas y despachos.
La próxima semana, confirmaciones formales
Aunque habrá que aguardar la oficialización para constatar estas postulaciones, ya son varios los voceros que dan por segura la participación de estos referentes clásicos. El jueves, cuando concluya el proceso de control legal, se disiparán las dudas. Sin embargo, todo indica que el “Frente Justicialista” volverá a las urnas con la misma receta que viene utilizando desde hace décadas.
Frente a este panorama, analistas locales se preguntan si el electorado—especialmente el que votó por un cambio rotundo en 2023— volverá a confiar en una estructura que mantiene sus nombres de siempre, apenas retocados por consignas de campaña que apelan a la continuidad. Para muchos puntanos, la respuesta quizá esté clara: más allá de los rostros y slogans, el Albertismo sigue sin soltar las mismas caras de siempre.