Tiene un frondoso prontuario delictivo, la Justicia lo benefició con prisión domiciliaria por un supuesto “problemas de salud”, la violó y cometió dos robos violentos.
En un nuevo caso que expone la falta de rigor en las decisiones judiciales, Valentín Pellegrini, un joven de 20 años con al menos cinco causas por robos violentos, recibió el beneficio de la prisión domiciliaria, pese a que el fiscal del caso había advertido sobre los riesgos de fuga y reincidencia.
Menos de un mes después, violó la medida y cometió dos nuevos robos, uno de ellos con arma de fuego. Solo entonces, y tras la presión del Ministerio Público Fiscal, el Tribunal de Impugnaciones revocó la domiciliaria y ordenó su traslado inmediato a la cárcel, donde permanecerá al menos 90 días mientras avanza su proceso judicial.
Un historial de delitos y una decisión judicial cuestionada
Pellegrini es un conocido delincuente en el barrio José Hernández, con un extenso prontuario delictivo. Sin embargo, el 24 de marzo, la jueza de Garantía Natalia Lazarte Otero le concedió la prisión domiciliaria, desestimando el pedido de prisión preventiva que había solicitado el fiscal de Instrucción Esteban Roche.
La magistrada argumentó su decisión en problemas de salud, alegando que el acusado sufría ataques de epilepsia. No obstante, el fiscal había advertido que:
- Pellegrini acumulaba cinco causas abiertas por robos con violencia.
- Se había negado a presentarse en varias audiencias previas.
- Testigos y víctimas se habían negado a declarar por temor a represalias.
Dos nuevos delitos y la revocación de la domiciliaria
Las advertencias se materializaron rápidamente. En los últimos días, Pellegrini protagonizó dos nuevos robos violentos:
- Primer hecho: Una víctima denunció que fue asaltada por el joven, quien además violó su arresto domiciliario. En un allanamiento en su domicilio, la Policía encontró ropa que coincidía con la descripción de la víctima y un cuchillo que habría utilizado en el ataque.
- Segundo hecho: Un taxista denunció que fue interceptado en plena calle por tres delincuentes armados, entre ellos Pellegrini, quienes le dispararon antes de escapar.
Ante esta nueva evidencia, el Tribunal de Impugnaciones, integrado por los jueces Yanina del Viso, Jorge Sabaini Zapata y Laura Molino, ordenó revocar la prisión domiciliaria y trasladar a Pellegrini al Servicio Penitenciario de San Luis.
Un sistema que no protege a las víctimas
El fiscal Roche criticó la decisión inicial de otorgarle domiciliaria y expuso la falta de garantías para las víctimas:
“Estamos hablando de cinco robos violentos, con víctimas que no querían declarar por miedo. Incluso, cuando supieron que le dieron domiciliaria, avisaron que no iban a testificar porque no había garantías para su seguridad”, explicó.
“A una de las víctimas, un menor de edad, lo atacaron brutalmente en su barbería. Usaron cadenas y otros elementos para golpearlo, dejándolo con lesiones de importancia”, agregó.
El caso vuelve a poner en debate el criterio con el que la Justicia otorga beneficios a delincuentes con antecedentes graves, permitiendo que sigan delinquiendo en libertad. Ahora, con la reincidencia de Pellegrini comprobada y su participación en hechos aún más violentos, la Justicia tuvo que revertir su decisión inicial.
La pregunta que queda es: ¿por qué esperar a que vuelva a delinquir para actuar?