Dos de estos últimos hechos fueron grabados por cámaras de video. Por uno de ellos va a juicio y piden dos años de cárcel.
Javier Alejandro López ya conoce el procedimiento por el que pasa toda persona que es sospechada de un delito y luego, en consecuencia, es detenida, procesada, enjuiciada y encarcelada. Ha pasado por lo mismo varias veces y así continuará al menos los próximos años. Este lunes, la fiscal instructora de Villa Mercedes, Daniela Torres, solicitó que en breve sea juzgado por el robo de dos bicicletas. La misma fiscal también lo investiga por sustraer un auto y luego chocarlo camino a su “aguantadero”, al tiempo que otro fiscal ya lo imputó por otro saqueo cometido días después del de las bicicletas.
Este lunes, en una audiencia de control de acusación, Torres solicitó la elevación a juicio por el caso de las bicicletas, causa por la que el hombre está con prisión preventiva hasta el 29 de marzo.
Si bien la pena a la que podría ser condenado por ese hecho será definida más adelante, la fiscal pidió que, en el caso de ser declarado culpable en el juicio, sea condenado a dos años de cárcel.
De trabajador a ladrón
El robo por el que está nuevamente preso ocurrió en noviembre, en un complejo de departamentos de calle Ardiles, alrededor de las 22:30. “Forzó (una abertura), entró y sacó lo que iba a buscar. Sabía dónde estaba lo que quería”, comentó una fuente.
Todo quedó registrado por una cámara de vigilancia, al igual que el “robo por efracción” que cometió un par de días después en la casa de un empleado judicial que vive en 9 de Julio y Edison.
“Le desvalijó la vivienda”, dijo. Ese saqueo fue a plena luz del día, durante la mañana, cuando la víctima trabajaba. Dicha causa está en manos del fiscal Maximiliano Bazla y próximamente requerirán su elevación a debate oral.
En muchos de los robos en los que estuvo involucrado, López actuó así, impunemente, a cara descubierta, con la luz diurna y ni siquiera llegaba a los domicilios de los damnificados en un vehículo propio, sino que sustraía los rodados en los que luego escapaba.
Así dieron con él esta última vez, gracias a un accidente que protagonizó. En esa ocasión, atropelló a una persona que terminó con lesiones graves.
“Manejaba un auto que había robado, chocó a otra persona, dejó el vehículo y escapó hacia un aguantadero que tiene en calle Italia”, refirió la fiscal. Una vez que la Policía llegó hasta esa vivienda, que López, al parecer, usurpa, descubrieron varios de los elementos que había sustraído.
El imputado, quien tiene más de 40 años, no toda la vida fue así, dijo Torres. Según trascendió, antes trabajaba y se ganaba la vida fabricando muebles, pero una vez que entró en el mundo de las drogas, su vida se descarriló. Comenzó a delinquir y así conoció cómo es estar tras las rejas.