Justicia implacable: una madre enfrentó sentencia máxima tras abandono fatal
La tragedia de una madre que dejó a su bebé de 16 meses sola en casa para irse de vacaciones culminó en una condena desgarradora. Kristel Candelario, residente de Ohio, fue sentenciada a cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional después de que su hija muriera de hambre y deshidratación mientras ella disfrutaba de su viaje. Los detalles del juicio revelaron una historia de abandono y desesperación.
La historia se remonta a junio de 2023, cuando Candelario decidió dejar a su bebé sola en su residencia en Cleveland para disfrutar de un viaje que la llevaría a Detroit y Puerto Rico. Tras su regreso, encontró a su hija sin vida. El juez Brendan Sheehan, al pronunciar la sentencia, calificó el acto como “el máximo acto de traición”, recordando el sufrimiento infligido a la pequeña.
La autopsia reveló detalles desgarradores: la niña murió de hambre y deshidratación grave, encontrada envuelta en mantas sucias con heces y orina. El juez enfatizó que este no fue un descuido, sino una serie de decisiones que llevaron a la muerte de la menor.
En su defensa, Candelario habló sobre sus luchas contra la depresión y otros problemas de salud mental, expresando su dolor por la pérdida de su hija y pidiendo perdón en el tribunal. Sin embargo, el juez rechazó estas explicaciones, señalando que la madre pudo haber tomado medidas para salvar la vida de su bebé en lugar de abandonarla.
Los padres de Candelario también intervinieron en el juicio, mostrando su apoyo a su hija y sus dificultades emocionales. Sin embargo, la sentencia fue clara: la mujer enfrentará el resto de su vida tras las rejas, recordándole cada día el terrible destino que le negó a su hija.