La Policía Federal y la Justicia realizaron 60 allanamientos simultáneos en ferias, depósitos y domicilios del Conurbano. Secuestraron dinero, documentos y detuvieron a Jorge Castillo junto con los jefes del circuito informal que movía millones a través de 89 sociedades de pantalla.
En un operativo tan amplio como quirúrgico, la Policía Federal Argentina (PFA) y la Justicia Federal de Lomas de Zamora ejecutaron este jueves 60 allanamientos simultáneos en ferias, oficinas y domicilios vinculados al polo comercial de La Salada. El objetivo: desarticular una trama de lavado de dinero, evasión impositiva y asociación ilícita que, según los investigadores, funcionaba desde hace años bajo la fachada del mercado informal más grande del país.
La orden partió del Juzgado Federal N.º 2 de Lomas de Zamora, a cargo del juez Luis Antonio Armella, y de la Fiscalía Federal N.º 2, encabezada por la fiscal Cecilia Incardona. El expediente se nutre de una pesquisa iniciada en 2023 por la Superintendencia de Agencias Federales de la PFA, que reconstruyó un entramado de 89 sociedades comerciales y más de 160 personas dedicadas a blanquear las recaudaciones en efectivo que generaban las ferias “Megapolo La Salada” y “Urkupiña”.
La figura más resonante de la red, Jorge Castillo —apodado “El Rey de La Salada”— fue arrestada durante los procedimientos. Junto a él quedaron detenidos los principales operadores y administradores de los predios, quienes ahora enfrentan cargos por lavado de activos, evasión impositiva agravada y asociación ilícita.
Los allanamientos incluyeron la participación de la Dirección General de Aduanas, la Agencia de Recaudación y Control Aduanero, unidades caninas y peritos informáticos. Los agentes incautaron documentación contable y societaria, dispositivos electrónicos, soportes digitales y grandes sumas en efectivo, material que —según fuentes judiciales— será crucial para rastrear la ruta del dinero.
De acuerdo con la investigación, una empresa contable “legalizada” funcionaba como plataforma de blanqueo, canalizando las ganancias de la venta informal de mercadería hacia cuentas y sociedades pantalla. Meses de análisis patrimonial y seguimientos encubiertos permitieron trazar la carrera del efectivo desde los puestos de la feria hasta firmas radicadas en distintas jurisdicciones.
Para los investigadores, la operación representa un golpe inédito al nexo entre el comercio informal y el delito económico organizado. Con las pruebas recolectadas, la causa ahora avanza hacia el desguace de la red financiera que sostenía el imperio de La Salada y la eventual elevación a juicio de sus responsables.