El secretario de Estado de la Discapacidad pidió “dejar de lado rencores y mezquindades” y llamó a los quince partidos del frente Ahora San Luis a comprometerse “como candidatos propios” de cara a los comicios legislativos del 11 de mayo. Elogió la política provincial de inclusión y revalidó su apoyo al gobernador y al intendente de Villa Mercedes.
Luis Giraudo, secretario de Estado de la Discapacidad y figura de peso en el oficialismo mercedino, lanzó ayer un pronunciamiento que busca disciplinar –y, al mismo tiempo, energizar– a la heterogénea coalición que respalda al gobernador Claudio Poggi. En una entrevista por Streaming, el funcionario instó a “dejar de lado viejos rencores” y a “militar esta elección como si todos fuéramos candidatos”, al tiempo que defendió la gestión de Maximiliano Frontera al frente de la intendencia de Villa Mercedes.
“Esta elección define el futuro de la provincia. El que no esté preparado para trabajar que tenga el coraje de correrse”, advirtió.
La arenga de Giraudo llega en un momento en que Ahora San Luis (integrado por quince sellos partidarios) exhibe, puertas adentro, diferencias sobre la estrategia de campaña de cara a las legislativas del 11 de mayo. Algunas voces del frente se han mostrado cautas a la hora de involucrarse en actividades proselitistas, una actitud que el secretario calificó de “pasividad injustificada”.
Respaldo explícito
Sin rodeos, Giraudo expresó una adhesión plena a Poggi –a quien calificó como “el único que hoy marca un rumbo claro”– y elogió al intendente Frontera: “En materia de discapacidad se ha comportado con grandeza: no tengo críticas que hacerle”.
El funcionario recordó que San Luis es la única jurisdicción que elevó el área a rango ministerial y destacó que el 10 % del cupo de viviendas sociales corresponde a personas con discapacidad. “Hace pocos días recibimos a un especialista israelí que vino a estudiar nuestro modelo de accesibilidad. No es menor y hay que sostenerlo”, subrayó.
Giraudo planteó que todos los partidos del frente deben “salir a convencer” para consolidar la mayoría legislativa de Poggi en la Cámara de Diputados y en el Senado provincial. “No alcanza con figurar en una boleta –añadió–; la ciudadanía espera compromiso visible”.
Esa advertencia, interpretan en la Casa de Gobierno, apunta a evitar dispersión en la militancia. “Si cada agrupación hace la plancha, la oposición se reorganiza”, deslizó un colaborador del gobernador.
Lectura política
La exhortación del secretario deja entrever dos objetivos: disciplinar a la coalición gobernante –todavía atravesada por sensibilidades partidarias– y reforzar la imagen de Poggi como garante de la estabilidad institucional tras la derrota del histórico oficialismo rodriguezsaaísta en 2023.
En voz baja, referentes de Ahora San Luis reconocen que la performance electoral del 11‑M será clave para el segundo tramo del mandato del gobernador, tanto por la gobernabilidad parlamentaria como por las señales al empresariado y a la Nación.
Entre los aliados, la respuesta inicial fue cauta. Algunos dirigentes admitieron que “faltaba músculo en la calle”, mientras que otros consideraron “lógico” el reclamo de Giraudo: “Nos dio visibilidad institucional. Es razonable que pida reciprocidad”.
Perspectivas
A menos de un mes de la contienda, el oficialismo provincial confía en retener los bastiones urbanos de San Luis y Villa Mercedes. En ambos distritos, el voto a favor de la continuidad de la gestión –sostienen los operadores locales– se cimentará en la valoración positiva de los programas de vivienda, inclusión y transparencia fiscal.
Mientras tanto, Giraudo –conocido por su estilo frontal– quedó posicionado como una voz que le pone nombre y apellido a las internas. “No especulo ni me escondo”, dijo en la entrevista. En un clima político que reclama definiciones, su mensaje parece apuntar a zanjar cualquier ambigüedad: apoyar el proyecto o correrse a un costado.
La vara, advierten en el entorno del secretario, está puesta en un nivel alto: “Unidad real, sin grietas ni excusas”.