El Presidente Milei cuestionó a la oposición tras el tropiezo en Diputados. LLA acusó a los gobernadores de traidores.
Javier Milei, rápidamente después de que se cayera la sesión en Diputados por la ley ómnibus y el oficialismo comunicara su decisión de que el proyecto vuelva a debatirse en comisión, se expresó desde Israel, a través de su cuenta de X, y aseguró que va a seguir su programa “con o sin el apoyo de la dirigencia política que destruyó” al país.
En este sentido, el jefe de Estado apuntó contra los legisladores que tomaron la decisión: “La casta se puso en contra del cambio que los argentinos votamos en las urnas. Sabemos que no va a ser fácil cambiar un sistema donde los políticos se hicieron ricos a costa de los argentinos que se levantan todos los días a trabajar. Nuestro programa de gobierno fue votado por el 56% de los argentinos y no estamos dispuestos a negociarlo con quienes destruyeron el país”.
Y denunció: “Hay sectores de la política que se resisten a hacer los cambios que el país necesita. Van a tener que explicarle a la sociedad por qué”.
“Vamos a continuar con nuestro programa con o sin el apoyo de la dirigencia política que destruyó nuestro país”, sentenció. Y cerró con su célebre frase: “Viva la libertad carajo”.
Pocos minutos antes, en un fuerte comunicado difundido por la Oficina del Presidente se apuntó contra los gobernadores que, según la visión del Gobierno, incumplieron los acuerdos que habían pactado horas antes de la sesión.
Tras cinco horas de debate en la Cámara de Diputados, el presidente del bloque libertario, Oscar Zago, pidió que tras la aprobación en general el proyecto de la ley ómnibus vuelva a comisión.
Pese al apoyo del Pro, el oficialismo no pudo mantener en pie los artículos por los cuales pretendían una amplia delegación de facultades y atribuciones para instrumentar una fuerte reforma del Estado.
“Este martes, los gobernadores tomaron la decisión de destruir la “Ley Bases y Puntos para la Libertad de los Argentinos” artículo por artículo, horas después de acordar acompañarla”, empieza el comunicado que fue difundido por la oficina del presidente.
Y denuncia: “Decidieron darle la espalda a los argentinos para proteger sus intereses e impedir que el gobierno nacional cuente con las herramientas para resolver los problemas estructurales de la Argentina”.
En este sentido, asegura que los gobernadores llegaron a sus puestos levantando “las banderas del cambio para hoy traicionar a sus votantes”.
“No vamos a seguir discutiendo con quienes exigen mantener sus privilegios mientras el 63% de los chicos argentinos no come”, sostiene. Y asegura: “La ley se debatirá cuando entiendan que es el pueblo quien la necesita, no el Gobierno”.
Además, sostiene que el presidente Javier Milei no permitirá “que quienes hace años se benefician de un sistema corrupto empobrecedor, frustren el futuro de todos los argentinos”.
Derrota oficialista
La primera derrota tuvo lugar cuando se abordó el capítulo sobre facultades delegadas al Poder Ejecutivo. En efecto, a instancias de los bloques dialoguistas -apoyados por el kirchnerismo- los libertarios y sus únicos aliados de Pro perdieron la posibilidad de manejar de manera discrecional los fondos fiduciarios como así también gozar de amplias atribuciones en materia energética y de seguridad.
Luego, los libertarios también cayeron derrotados en casi todos los puntos incluidos en el crucial artículo 5 referido a la Reforma del Estado. Fue en este contexto cuando el oficialismo pidió un cuarto intermedio en sus bancas para intentar reconducir la sesión.
Sin embargo, al finalizar el cuarto intermedio, el presidente del bloque libertario, Oscar Zago, pidió el retorno a comisión de todo el proyecto de ley.
“Al oficialismo le pedimos que tenga alguna cuota de flexibilidad, les encanta seguir perdiendo”, pidió el diputado Miguel Pichetto a la bancada oficialista. Y luego recomendó: “Traten de ver cómo receptar algunas propuestas y ganar. No hay que perder, hay que ganar”.