UTA y el Gobierno provincial acordaron una mesa de diálogo permanente. Este martes el servicio urbano e interurbano volverá a prestarse con normalidad.

Luego de una jornada de incertidumbre para miles de usuarios, el conflicto entre los choferes de colectivos y el Gobierno provincial tuvo una resolución positiva: el transporte urbano e interurbano en San Luis funcionará con normalidad a partir de este martes.

El acuerdo se alcanzó tras una reunión clave entre el secretario de Transporte de la provincia, Víctor Cianchino, y el secretario general de la Unión Tranviarios Automotor (UTA) San Luis, Iván Piñedo. Ambos coincidieron en la necesidad de abrir canales institucionales de diálogo que permitan resolver los reclamos laborales que originaron la medida de fuerza.

Durante el encuentro, que también contó con la presencia de Gabriel Bustos, director de Transporte, y Federico Amieva, subdirector del área, se definió establecer una mesa de trabajo permanente para abordar las demandas vinculadas a condiciones laborales, atrasos salariales y mejoras en la infraestructura del servicio.

El levantamiento del paro se confirmó al finalizar la reunión, lo que permite garantizar la prestación del servicio de transporte público en toda la provincia sin interrupciones.

Desde el gremio celebraron la posibilidad de “avanzar con soluciones reales”, mientras que desde el Gobierno destacaron “la voluntad de diálogo y el esfuerzo conjunto por garantizar un servicio esencial para los sanluiseños”.

El conflicto se había desatado tras una serie de reclamos por parte de los trabajadores, quienes exigían respuestas concretas a condiciones laborales deterioradas y atrasos en los pagos. El paro, que afectó el normal funcionamiento del sistema durante la jornada anterior, generó complicaciones para miles de ciudadanos que dependen a diario del transporte público.

Con este acuerdo, las partes evitaron la profundización de un conflicto que podía haberse extendido durante toda la semana. La continuidad de la mesa de diálogo será clave para monitorear el cumplimiento de los compromisos asumidos y evitar nuevas interrupciones en el servicio.