El fiscal Esteban Roche ofreció un juicio abreviado de tres años de prisión efectiva para el acusado, que arrastra cuatro expedientes por abuso de armas, resistencia y hurto. Pizarro ya está procesado, además, por el asesinato de Carlos Magallanes y por tentativa de homicidio en otra causa.
El nombre de Franco Alejandro Pizarro (28) circula en los despachos judiciales puntanos desde hace al menos cinco años. Este lunes el fiscal de Instrucción N.º 3, Esteban Roche, pidió a la jueza Adriana Lucero Alfonso que homologue un juicio abreviado: tres años de prisión de cumplimiento efectivo por siete hechos cometidos entre febrero de 2023 y enero de 2024.
Cuatro causas, un mismo patrón de violencia
Fecha | Delito principal | Descripción resumida |
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3 Feb 2023 | Abuso de armas y amenazas | Dos disparos contra un vecino del barrio San Luis XV y otros dos contra el jefe de la Comisaría 23. |
5 Feb 2023 | Amenazas y resistencia | Ingreso sin pagar a un camping de San Jerónimo; insultos, escupitajos y huida en moto pese a la voz de alto. |
16 Sep 2023 | Hurto | Uso de dispositivo “Pandora” para abrir una Ford Ranger en el Rosendo Hernández; sustrajo $180 000. |
24 Ene 2024 | Abuso de armas y agresión a policía | Tiros frente a una vivienda del barrio Pucará; golpeó a una agente que acudió al disturbio. |
La defensa, ejercida por Olga Allende, aceptó la calificación y la pena propuesta. Ahora la magistrada debe decidir si convalida el acuerdo y dicta sentencia.
Dos frentes pendientes mucho más graves
Mientras debate este abreviado, Pizarro sigue detenido por:
Homicidio simple de Carlos Magallanes (abril 2022): la causa ya fue elevada a juicio con un pedido fiscal de 20 años.
Homicidio en grado de tentativa y encubrimiento (hechos de 2021), aún en etapa de investigación.
Riesgo procesal y antecedentes
El fiscal subrayó la reincidencia, la violencia exhibida —uso de armas de fuego en vía pública, ataques a la autoridad— y la solidez de la prueba (testigos, secuestros, cámaras, recupero parcial del dinero). La jueza definirá en los próximos días si los 36 meses de prisión efectiva avanzan, antes de que el acusado se siente en el banquillo por los crímenes de sangre.
Con este abreviado, la Justicia busca al menos cerrar un capítulo de la saga judicial de Pizarro, cuyo historial delictivo sigue creciendo y amenaza con traducirse en penas mucho más severas.