La nulidad en el sorteo de jueces retrasó el segundo juicio.
El segundo juicio por el asesinato de Romina Aguilar, programado para iniciar semanas atrás, enfrenta un nuevo obstáculo debido a la impugnación del sorteo de jueces. La defensa de Diego Lorenzetti, uno de los imputados, ha cuestionado la selección del Tribunal, argumentando que los magistrados asignados previamente podrían estar contaminados al haber tenido acceso al expediente, lo cual va en contra del nuevo Código Procesal Penal.
Originalmente, el sorteo estaba destinado a elegir entre los mismos tres jueces que iban a presidir el debate cancelado. Sin embargo, la defensa plantea la necesidad de ampliar las opciones, proponiendo la incorporación de jueces de otras circunscripciones judiciales para evitar posibles nulidades y garantizar imparcialidad.
La querella, representada por el abogado de la familia de Aguilar, aboga por la inclusión de tres jueces adicionales, mientras reconoce que los magistrados actuales no han emitido dictámenes y podrían ser considerados imparciales en un nuevo sorteo. Su enfoque se centra en asegurar que el juicio avance sin demoras, con el objetivo de esclarecer la verdad y obtener justicia para la víctima.
La nueva designación de un representante legal por parte de la madre de Romina Aguilar subraya el deseo de la familia de buscar la verdad y lograr que Romina descanse en paz, sin buscar venganza.