La Dirección Provincial de Transporte informó que el sábado 3 de mayo se trasladaron 14 579 pasajeros en servicios interurbanos hacia los dos principales santuarios de la provincia. El operativo —que incluye controles en ruta, refuerzos de frecuencias y personal de fiscalización— se desarrolla sin incidentes y continuará hasta el cierre de las fiestas patronales.
El cuarto día del dispositivo especial coincidió con la jornada central de las festividades del Cristo de la Quebrada y del Divino Señor de Renca. Desde la madrugada del sábado los andenes de la EDIRO, la Terminal de La Punta y el punto de embarque de la UPrO en Tilisarao mostraron un ritmo constante de salidas: familias completas, caminantes que decidieron “acortar” parte del trayecto sobre un colectivo y fieles que viajaron por primera vez al mítico cerro puntano formaron parte de la postal.
Cifras oficiales
14 579 pasajeros utilizaron el servicio interurbano el sábado 3.
El viernes 2, en la previa, se habían movilizado 1 876 personas desde la EDIRO a Villa de la Quebrada y 210 desde La Punta; 700 subieron a unidades con destino Renca en Tilisarao.
Gabriel Busto, director provincial de Transporte, calificó el balance como “altamente positivo” y destacó que el refuerzo de frecuencias —coordinado con las empresas prestatarias— evitó demoras significativas en los embarques.
Controles y seguridad vial
Para garantizar el flujo ordenado de vehículos y peregrinos, inspectores de la Dirección y personal policial montaron puestos fijos y móviles en los accesos a ambas localidades. Paola Rojo, a cargo del control operativo en Villa de la Quebrada, subrayó que “el tránsito se mantuvo fluido, sin retenciones prolongadas, y los protocolos de inspección se cumplieron sin inconvenientes”.
Según la funcionaria, la afluencia de turistas “fue notoria” y la mayoría viajó con reservas previas, lo que agilizó los despachos: “La organización permitió que los fieles llegaran con tiempo suficiente para las misas y las promesas en el cerro”.
Refuerzo dominical y cierre
El operativo continuará hasta la madrugada del lunes, cuando se espera el regreso masivo de peregrinos. Las firmas de transporte mantendrán los horarios extraordinarios y la Dirección desplegará inspectores adicionales para acelerar la subida y bajada de pasajeros, verificar la documentación de los choferes y controlar el estado de las unidades.
Aunque el flujo dominical suele superar al del sábado, en Transporte confían en que la experiencia de los primeros cuatro días permitirá absorber la demanda: “Tenemos diagramado un refuerzo dinámico —explicó Busto—: cada empresa tendrá colectivos en stand-by para salir de inmediato si los andenes se saturan”.
La peregrinación al Cristo de la Quebrada y al Señor de Renca —una de las manifestaciones de fe más emblemáticas de Cuyo— volvió a confirmar su poder de convocatoria. Y, a la par, el dispositivo logístico demostró que la coordinación entre organismos públicos y privados puede marcar la diferencia entre el colapso y la normalidad.