El delantero del Galatasaray y la actriz visitaron el exclusivo Camer Country Club: hotel propio, club hípico y casas que superan los US$ 5 millones. Buscan mudarse con los tres hijos de ella mientras él negocia la extensión de su contrato.

El sábado por la mañana Mauro Icardi, Eugenia “la China” Suárez y los tres hijos de la actriz —Rufina Cabré, Magnolia y Amancio Vicuña— despegaron en un jet privado rumbo a Estambul. La excusa visible era alentar al Galatasaray, que el domingo recibía a su público; la real, explorar el mercado inmobiliario turco para dar el paso definitivo como pareja.

Contrato nuevo, vida nueva

Icardi, en plena recuperación de su lesión, ya acordó de palabra continuar como delantero del club más popular de Turquía. Esa prolongación —con sueldo top en la liga— elimina cualquier motivo para seguir ocupando la vivienda que todavía comparte con Wanda Nara en un barrio cerrado a las afueras de la ciudad. El rosarino quiere cerrar esa etapa y acomodarse con la China y los chicos en una residencia propia.

El country de los millonarios

La televisión turca y el programa Mujeres argentinas (El Trece) filtraron la primera opción en carpeta: una mansión dentro del Camer Country Club, un complejo de élite a 30 km del Bósforo. No es un simple barrio privado: funciona como una microciudad autónoma con colegio, cafetería, spa, club hípico, restaurantes, canchas de golf y tenis, hotel interno —habitaciones desde US$ 250 la noche— y seguridad 24/7.

Las casas, de estilo contemporáneo, superan los 800 m² cubiertos y se venden en torno a los US$ 5-7 millones. El lote elegido por la pareja incluye piscina climatizada, gimnasio propio y vistas a una reserva forestal.

La interna con Wanda

Mientras recorren propiedades, Icardi y Suárez siguen instalados en la casa que él compró con Wanda en 2023. Allí todavía quedan pertenencias de la conductora de Bake Off Famosos, protegidas bajo llave y sin autorización para ser retiradas. La tensión no impidió que la China subiera a Instagram escenas familiares: Mauro jugando en la pileta con Magnolia al grito de “¡otra vez, papá!”, Amancio prendido de su cuello y Rufina filmando las piruetas acuáticas.

Qué falta para la mudanza

El futuro contrato de Icardi se firmaría en las próximas semanas, y la búsqueda de vivienda avanza a la par. Si no aparecen trabas, la pareja apuntaría a instalarse antes del arranque de la próxima temporada turca, en agosto. El entorno del futbolista admite que “hay varias propiedades sobre la mesa”, pero la mansión del Camer Country Club encabeza la lista: privacidad, amenities de resort y, sobre todo, distancia prudente de la prensa local.

El tablero sentimental

Para Mauro, la mudanza sería el cierre simbólico de su relación con Wanda Nara. Para la China, la oportunidad de un nuevo comienzo familiar en un país que la recibe sin los focos persistentes de Buenos Aires. Entre fotos en la piscina, tours inmobiliarios y la promesa de estabilidad, la novela mediática se reinventa en modo “felices los cuatro”… aunque a 11 000 kilómetros de casa.