Un hombre de 21 años intentó matar con un destornillador a su pareja y a su madre en San Luis, le dictaron la prisión preventiva.
En una audiencia de formulación de cargos, esta mañana el juez de Garantía Nº 1, Juan Manuel Montiveros Chada imputó y le dictó la prisión preventiva por 120 días a Matías Pérez, de 21 años, que está acusado de intentar matar a su pareja y a su propia madre.
El hecho se produjo en un departamento del barrio Procrear de la ciudad de San Luis.
La fiscal de Instrucción Nº4, María del Valle Durán, pidió la preventiva por cuatro meses y que sea imputado por los delitos de tentativa de homicidio calificado por el vínculo y por mediar violencia de género en concurso real en contra de ambas mujeres. El magistrado hizo lugar a la medida.
El hecho
El viernes pasado, entre las 19:30 y 21, Pérez empezó a discutir con su pareja en un vehículo en el que circulaban cerca de Potrero de los Funes. En un momento determinado, se puso violento, comenzó a darle golpes de puño mientras le decía que iba a matarla. Luego, tomó por un camino de tierra, cerca del Parque de la Quebrada, le pegó patadas en la cabeza y siguió agrediéndola todo el camino hasta la ciudad de San Luis.
En la capital puntana se dirigieron a la vivienda de la madre del acusado, ubicada en el edificio 11 de la manzana 118 del barrio Procrear. Allí, le pidió a la víctima que se escondiera y fuera directo a la habitación pero cuando la joven ingresó a la propiedad, inmediatamente le solicitó auxilio a su suegra y le mostró las lesiones que le había producido, por lo que esta última, retó y reclamó a su hijo por lo que había hecho.
La pareja le pidió a la mujer que la llevara a su casa pero Pérez no las dejó salir y cuando logró acercarse a la puerta de ingreso del departamento, el imputado se le abalanzó, la ahorcó e intentó matarla con un destornillador que tenía en la mano dándole puntazos en el cuello y en el pecho. Sin embargo, no logró su cometido ya que su suegra intentó defenderla pero el joven empujó a su propia madre al piso y le pegó en la cabeza con la punta de la herramienta.
Como pudo, la joven salió corriendo de la vivienda y pidió auxilio a un vecino. En ese momento, Pérez dejó de agredir a su madre, escapó pero fue detenido a las pocas cuadras por personal policial. Al principio se resistió pero finalmente fue reducido por los uniformados.