El impacto de las subas en las cuotas de las empresas de medicina prepaga genera una merma significativa en la cantidad de afiliados, quienes buscan alternativas más accesibles en medio de la crisis económica.
Las empresas de medicina prepaga en Argentina están enfrentando una crisis significativa debido a los reiterados aumentos en las cuotas que llevaron a una pérdida considerable de afiliados. Las desvinculaciones fluctúan entre un 3% y un 10% en lo que va del año, marcando un preocupante declive en las carteras de clientes.
El contexto económico desfavorable, caracterizado por la desregulación de precios y una disminución en la actividad económica, exacerbó la situación. Desde enero, cuando se implementaron actualizaciones en las cuotas que alcanzaron el 40%, se observó una primera ola de desafiliaciones. Esta tendencia continuó en febrero y marzo, con movimientos más pronunciados de los afiliados abandonando sus planes de salud.
La autorización para que las empresas de medicina prepaga ajustaran sus tarifas en un 134% en 2023, combinada con un aumento del 135% al 165% en los primeros cuatro meses de 2024, impactaron significativamente en el poder adquisitivo de los afiliados. Muchos se ven obligados a buscar opciones más económicas ante la dificultad para costear las cuotas.
Según Fabien Barralon, cofundador de ElegiMejor, un sitio web que compara planes de salud, la demanda de información sobre alternativas más accesibles se triplicaron desde enero. Los afiliados buscan planes más básicos y económicos, priorizando el precio sobre las prestaciones.
Para Carlos Regazzoni, exdirector ejecutivo del PAMI, esta crisis podría empeorar debido a la posibilidad de cierres de fábricas y cambios en el piso salarial para tributar Ganancias, lo que reduciría aún más los ingresos de las personas.