La justicia logró dar con el paradero de las personas que robaron a un jubilado de más de 80 años en San Luis. Uno de ellos tenía un romance con un policía, le robó el uniforme para cometer el delito.
El viernes , cayeron los delincuentes que se hicieron pasar por policías para asaltar y golpear a un jubilado de 88 años. Fue en la siesta del 14 de junio cuando Cristian Leandro “El bocón” Vílchez y Daiana Soledad Orozco lograron ingresar a la vivienda del hombre, en el barrio Amaro Bustos, y le sustrajeron $400 mil y otras pertenencias.
La víctima, Andrés Funes, sufrió heridas en las costillas y el rostro. Tuvo que ser asistido en el Hospital del Oeste. Los malvivientes huyeron con el botín y se desprendieron de la ropa en un canal paralelo a la calle Belgrano.
El fiscal de Instrucción N°2, Ricardo Barbeito dio la orden de detención para ambos, pero se encontró con que la mujer de 32 años ya estaba a disposición de la Justicia. El martes había sido aprehendida cuando intentó ingresar a la vivienda de otra anciana saltando una reja.
Pero además de eso, había sido denunciada por el cabo Ariel Romero. Con el hombre mantenía una relación sentimental y horas antes del asalto le había robado diversos elementos de su casa, entre esos, la indumentaria de la fuerza y el cargador del arma.
Barbeito dijo que lograron reconstruir el hecho gracias a un testigo y cámaras de seguridad: “Lamentablemente pudieron huir de la casa de la víctima disfrazados de policías. Posteriormente descartaron estas vestimentas en un canal cercano a la casa en la cual cometieron el delito, pero afortunadamente en el momento en que se estaban cambiando y volvían a su ropa civil, fueron vistos”.
Con el relato del hombre y a través de peritos de la Policía pudieron elaborar un retrato hablado de los delincuentes que “fue de un parecido asombroso y permitió una individualización en cercanías en algunas cámaras de seguridad”.
En relación de la vestimenta que utilizaron, el fiscal explicó que había una denuncia de un efectivo donde “manifestó que cuando se fue a trabajar había quedado en su domicilio una mujer, justamente la señorita Orozco, con quien supuestamente tiene o tenía una relación”.
“Cuando él volvió, a las 24 horas luego de su turno, encontró toda la casa revuelta y con vestigios y signos de haber sido víctima del desapoderamiento de varias cosas, entre ellas, la ropa que se utilizó para para cometer el delito”, especificó.
El sábado, el representante del ministerio Público Fiscal formuló cargos contra Vílchez por robo simple y solicitó prisión preventiva por 120 días. Pero también lo acusó por encubrimiento debido a que “en el momento en que se hizo el allanamiento en su casa se encontraron cosas pertenecientes al policía”. La defensa pidió la prórroga de ocho días, que finalizará el domingo.
En relación a Orozco, precisó que como ya estaba afectada a otra causa donde está vigente la prórroga, una vez que culmine será imputada formalmente. Y adelantó que también requerirá cuatro meses de preventiva.
Barbeito mencionó que ambos sospechosos tenían varios antecedentes delictivos. (CH)