Cambio en las acusaciones contra los siete detenidos genera controversia antes del juicio por jurados.
En un giro inesperado, el caso del femicidio de Cecilia Strzyzowski en Chaco ha tomado un nuevo rumbo, causando revuelo en la sociedad y el ámbito político de la región. Justo antes de que el caso fuera elevado a juicio por jurados, el Equipo Fiscal Especial (EFE) introdujo cambios significativos en las acusaciones contra los siete detenidos vinculados al crimen.
El cambio más notable se centra en la imputación de los padres de César Sena, el principal acusado por el femicidio. Emerenciano Sena y Marcela Acuña, anteriormente considerados coautores del crimen, ahora han sido ubicados por los fiscales fuera de la escena del crimen. Esta modificación ha llevado a que sean considerados autores primarios del delito, aunque con un grado de acusación menor que el anterior.
La nueva imputación contra Sena padre y Acuña sigue contemplando la pena de prisión perpetua, acusándolos de homicidio doblemente agravado por el vínculo y por haberse cometido en contexto de violencia de género, en carácter de partícipes primarios. Esta alteración en las acusaciones se basa en la interpretación de los fiscales de que el crimen ocurrió horas antes de que los padres llegaran a la escena del crimen, lo que sugiere que el homicidio fue cometido únicamente por César Sena, cuando se encontraba solo con la víctima.