Un exintendente del norte de la provincia que actualmente se desempeña como profesor, estaría sospechado de acoso sexual a una alumna.
Un exintendente del norte de la provincia, que actualmente se desempeña como docente del nivel secundario en el valle del Conlara, estaría acusado de acosar sexualmente a una joven estudiante, dentro de un establecimiento escolar.
Se trata de Pablo Moreno, exintendente de la localidad de Santa Rosa del Conlara, quien este año fue removido de su cargo en la escuela N°17 de Santa Rosa del Conlara, por un hecho de “conducta inapropiada” en perjuicio de una menor de edad, que el Ministerio de Educación se encuentra investigando.
Ante la investigación en curso, se ordenó su traslado a otro establecimiento y se dispuso que realizara “tareas pasivas”, lo que generó el descontento de los padres de esa otra escuela (imagen principal).
El docente se encontraría bajo sumario administrativo y según fuentes confiables la justicia del multifuero de Santa Rosa del Conlara no le estaría brindando al caso la celeridad que esperan algunos miembros del gobierno provincial.
Se presume que en los próximos días habría importantes novedades que afectarían directamente al cuestionado ex intendente y también ex senador provincial.
Todo indica que son varias las mujeres dispuestas a declarar en contra del mismo docente, por hechos similares que lo habrían tenido como protagonista al cabo de las últimas dos décadas y que por temor nunca hablaron.
La preocupación es grande en el departamento Junín y el trabajo de algunas reparticiones provinciales estaría dirigido a actuar “sin anestesia”, según dijo la fuente consultada.
PROTESTA
Según informó el sitio “El Corredor Noticias”, a mediados de junio unos cien padres y madres de estudiantes de todos los niveles del Centro Educativo N°16 “María Palmira Cabral de Becerra”, de Rincón del Este, se manifestaron enérgicamente tras conocer la asignación del docente y ex intendente de Santa Rosa del Conlara, Pablo Moreno, a tareas administrativas en la institución.
Los familiares, que se enteraron de la incorporación a través de grupos de WhatsApp, se convocaron en el establecimiento educativo al que acuden unos 800 alumnos y alumnas, para pedir explicaciones a la directora Elizabeth Pereyra.
En un clima de tensión, expresaron su inquietud y descontento por la presencia de Moreno, quien fue removido este año de la escuela N° 17 de Santa Rosa del Conlara por un presunto hecho de abuso en perjuicio de una menor de edad que el Ministerio de Educación se encuentra investigando.
Durante una acalorada reunión, los padres exigieron acciones concretas para garantizar la seguridad de sus hijos y reclamaron transparencia a la directora Pereyra. “Nosotros como padres tenemos derecho a saber quién está en contacto con nuestros hijos”, declaró una madre preocupada. “Queremos que la institución tome medidas firmes hasta que se aclare la situación”.
Además, cuestionaron la falta de comunicación y coordinación por parte de las autoridades escolares y del Ministerio de Educación. “Estamos acá exigiendo una respuesta porque no hemos recibido información clara,” exclamó otro padre.
El malestar se fijó en el libro de actas. Allí se dejó constancia de las principales preocupaciones de los padres, entre ellas: la solicitud de la inmediata presencia de autoridades del Ministerio de Educación y la exigencia de que el docente sea desafectado de sus funciones. Además, manifestaron su disconformidad con la gestión de la directora Elizabeth Pereyra y solicitaron su destitución por permitir el ingreso de un profesor investigado por “conductas inapropiadas” con menores de edad.
Las respuestas por parte del Ministerio de Educación no tardaron en llegar. Tras más de dos horas de debate, la directora de Educación Obligatoria, Olga García, comunicó por teléfono que Moreno será reasignado a otro establecimiento para cumplir otro tipo de funciones.
DECLARACIONES DEL SUPERVISOR
En declaraciones a ECN, el supervisor educativo Walter Núñez brindó detalles sobre el caso. Dijo que Moreno fue trasladado a la escuela de Rincón para desempeñar tareas pasivas mientras se investiga su presunto comportamiento inapropiado.
Este procedimiento, explicó Núñez, se basa en el decreto 46, que ordena la separación temporal del docente ante sospechas de violación de los derechos de los niños. Durante este período, Moreno no tiene permitido ningún tipo de contacto con los alumnos.
En este sentido, el supervisor subrayó que la separación del docente es una acción preventiva, ya que la investigación está en curso. El sumario administrativo determinará si Moreno es responsable de las acusaciones, en cuyo caso sería sancionado, o si se le permite regresar a sus funciones normales si se demuestra su inocencia.