Tras el anuncio de General Motors y Cadillac en la Fórmula 1, el joven argentino expresó su ilusión por competir en la máxima categoría del automovilismo.
El reciente acuerdo entre General Motors (GM) y la Fórmula 1 para ingresar como equipo en 2026 encendió las expectativas en el mundo del automovilismo, y en particular, en Nicolás Varrone , un talentoso piloto argentino de 23 años. Con un divertido mensaje en sus redes sociales, el joven despertó entusiasmo y apoyo en su país, convirtiendo el hashtag #NicoVarroneAF1 en tendencia.
Un paso importante para GM y una oportunidad para Varrone
El proyecto de GM, que será inicialmente un equipo cliente con base en las instalaciones de Andretti en Silverstone, busca desarrollar sus propias unidades de potencia para 2028. Esta incursión de una marca estadounidense en la Fórmula 1, tras décadas de ausencia, podría abrir nuevas puertas para pilotos emergentes como Varrone.
En su cuenta de X (antes Twitter), Varrone publicó: “Dios, ¿tú me escuchas?” , reflejando su entusiasmo ante la posibilidad de un futuro en la Fórmula 1.
¿Quién es Nicolás Varrone?
Nacido en Argentina, Nicolás Varrone ha demostrado ser una de las jóvenes promesas del automovilismo internacional. Actualmente compite como piloto oficial de Corvette y ha logrado importantes triunfos, incluidos dos títulos en las 24 Horas de Le Mans y uno en las 24 Horas de Daytona .
A lo largo de su carrera, Varrone ha participado en categorías de alto nivel como la IMSA SportsCar Championship , la European Le Mans Series y la GT World Challenge Europe . Su versatilidad y capacidad para adaptarse a diferentes autos y circuitos han sido clave para consolidarse como un referente del automovilismo de resistencia.
Recientemente, también manifestó interés en competir en la categoría IndyCar , demostrando su ambición por alcanzar los máximos niveles del automovilismo mundial.
Con su trayectoria en ascenso y la entrada de GM a la Fórmula 1, el sueño de Varrone de representar a Argentina en la máxima categoría parece más cerca que nunca .
